Tras el fin de las cuarentenas estrictas, he escuchado al menos a dos personas que —sin ninguna pizca de ironía— han elegido musicalizar sus viajes en auto con Limp Bizkit.
Supongo que el mundo exterior es, en efecto, un lugar extraño y peligroso.
Tras el fin de las cuarentenas estrictas, he escuchado al menos a dos personas que —sin ninguna pizca de ironía— han elegido musicalizar sus viajes en auto con Limp Bizkit.
Supongo que el mundo exterior es, en efecto, un lugar extraño y peligroso.